Exigen requisitos muy estrictos. Pero algunos hablan de "portación de cara".El mundo está globalizado para ciertas cosas, pero seguro que no cuando se habla de fronteras. Muchos argentinos suelen sufrir la rigidez de los confines estatales, fundamentalmente cuando el destino es España y, sobre todo, Madrid. Según datos de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea, la entidad pública empresarial que agrupa las terminales aéreas de ese país, a los que tuvo acceso Clarín, uno de cada diez compatriotas que intentan entrar allí por la Terminal 1 de Barajas deben volverse. Sólo en los primeros cinco meses de este año, la policía española rechazó a 4.064 extranjeros, de los cuales 497 eran argentinos.
Los compatriotas no admitidos en Madrid ostentan el tercer puesto en la lista de rechazados, detrás de brasileños (873) y paraguayos (529), y por encima de venezolanos (432) y hondureños (185).
Los números son claros, y no son los únicos. De acuerdo a un relevamiento hecho por la Asociación Argentina de Derecho del Turismo (AADETUR), el 70% de los reclamos que recibieron por rechazo en los últimos 18 meses son por no admisión en la Terminal 1 de Barajas, muy por encima de otros destinos como el Reino Unido (8%), la moderna T4, también de Barajas (7%), Italia (6%) y Francia y Alemania (ambos casos con 1,5% cada uno).
A los especialistas les llama la atención esta especie de capricho en la T1, a donde llegan los vuelos de las compañías Aerolíneas Argentinas, Air Comet y Air Europa (en la T4 aterrizan Iberia, Lan y otras). Las supuestas razones por las cuales se niega el ingreso son principalmente la falta de una carta de invitación o del boleto de regreso, así como la falta de medios económicos (efectivo o tarjetas de crédito) determinados para su estadía. Son todos requisitos estipulados en un convenio firmado por el Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea. Pero lo cierto es que en muchos casos el rechazo ni siquiera tiene que ver con esto.
"Seguro que en algunas situaciones es porque no cumplen con alguna de las obligaciones, pero sospechamos que muchas veces es simplemente por portación de cara. Es muy llamativo, y sobre todo se da con el vuelo de Aerolíneas, que llega a las 13.40", explica Diego Benítez, de AADETUR.
Si bien el Gobierno argentino aún no tiene las cifras de este año, de acuerdo con fuentes consulares consultadas por este diario, de 170 mil argentinos que el año pasado volaron a España, hubo 1.000 no admitidos (0,58%), y la mayoría tuvo el problema en Barajas. "El Gobierno está al tanto, se ha citado al embajador español, se ha pedido información porque el tema nos preocupa", reconocieron.
Otras fuentes oficiales admiten, de todos modos, que "la gran mayoría falta en alguno de los requisitos, por más que éstos nos parezcan injustos. Eso no quiere decir que justifiquemos el maltrato y los exabruptos que sabemos que tiene la policía española". De hecho, el "castigo" es grave: si al rechazado le tachan el pasaporte no puede volver a Europa por tres años.
Fuente: Diario Clarin